No es que este tío sea un hombre muy discreto que digamos, aunque reconoce que eso de que este restaurante tenga baños unisex ha sido muy conveniente. Siguió a su hijastra veinteañera hasta el lugar mientras la familia seguía celebrando en la mesa, y la descubrió haciéndose un dedo a la muy guarra. Se quedó perplejo y cachondo a partes iguales, pero no quiso que el coño mojado de la chica se quedara a medias, ¡claro que no!
Así, la montó sobre el lavabo y acabó metiéndole su polla empalmada, en una follada incestuosa que acabó, cómo no, con los dos corriéndose como locos.
Categoria: padre e hija
Duración: 20:36
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